jueves, 16 de agosto de 2007
La corona de la imprudencia
Tengo una amiga que permanentemente compite conmigo por este alto honor, ser la más imprudente!
Por suerte en ninguno de los dos casos, nuestra imprudencia es por mala fé, es sólo algo que brota incansablemente de los poros, poco a poco me voy dando cuenta cuando gano puntos en mi carrera de imprudente, antes no me daba cuenta para nada.... lo describo, hago un comentario y cuando termino la última sílaba noto las transformaciones en las caras de los interlocutores y sé casi con un 100% de seguridad que lo he hecho otra vez, he sido la más imprudente del momento.
Me pasa casi todos los días, hago un comentario según yo hasta dulce y tengo inmediatamente la sensación o de que arruiné una sorpresa o que la otra persona ha cometido el error que comento, o que estoy absolutamente fuera de lugar..
¿Por qué no puedo quedarme callada y guardar cada uno de mis cien mil pensamientos por hora para mi propio ser????
Generalmente tengo suerte, la gente se da cuenta que no lo hago con mala intención y no lo hago para ofenderlos... en el fondo puedo sentir que les causo malestar, y siento que los colores suben al rostro y la verguenza me invade sin piedad... en mi casa me río de mí misma de la situación que provoco y también escondo la cara de la verguenza.
Creo que mi destino es ser impru impru toda la vida, que más da! es parte de mi gracia
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por pasar, comentar y leerme!