Es mala costumbre, pero así soy yo, llena de malas costumbres.
Tengo alma de taxónoma, me gusta clasificar. Yo clasifico a las personas según varios estándares, depende de lo que dicen, hacen, cómo se ven, cómo los veo y en fin detalles en los que yo siempre me fijo.
Hay que aclarar que cada uno de los tipos es independiente de su trabajo de lo que estudió o lo que hace para sobrevivir...(me explico??)
Por ejemplo tenemos a los intelectualiqués: que suelen creerse sobre una nube, clasifican a las personas según el tipo de libro que leen, y son en general críticos-snob.
Los matematiqués: que son suuuupeeer inteligentes, nadie más inteligente que los que encuentran en los números toda razón de ser, generalmente tratan como a estúpidos a los que no estamos en su onda (o es suprema timidez).
Los bio: que comen todo orgánico, los que usan la ropa con algodón con sello verde y de justicia laboral incluída (se pueden dar el lujo de pagar 5 veces más), jamás un maquillaje en la cara o temas fashion superficiales, jabones orgánicos, shampoo orgánico.... comida orgánica, en fin (pase un par de semanas con una chica bio y fue un poco tenaz).
Los que parecen pobres y tienen familia adinerada: se visten con ropa que parece harapos, muchas veces medios mugrosos, les encanta comprar ropa usada. El lema interno mientras más pobre mejor (pero claro está que pueden tener una super computadora, viajes exclusivos y sobre todo nunca han sido pobres) esta fase de querer ser pobre suele pasar pronto.
Los cientifiqués: todos los temas de conversación se relacionan al organimo con el cual trabajan, en qué fase del análisis están, cuál es el mejor protocolo para extraer DNA, el número de publicaciones en revistas indexadas tiene, en qué lugar piensa hacer su segundo post doc, quién es su mentor en la universidad en fin (pasé una semana rodeada de los de este tipo.... I N C R E I B L E M E N T E aburrido)
Los víctimas de la circunstancia: el mundo los odia, todo les va mal todo es su culpa son lo peor de lo peor y se merecen cada centímetro de sufrimiento que tienen. La frase preferida que les gusta escuchar es "pobrecillo infeliz".
Los de sonrisa permanente; lo típico es que digan es que: todo me va bien, mi marido es maravilloso, amo mi trabajo, mis hijos son lo máximo, la vida me sonríe cada día, he sido absolutamente bendecida y nunca hago algo mal, todos me caen bien, soy amiga de todos, no me gustan los problemas.....
Los grises: término medio en todo, cero discusiones, cero pasión, complacen a todos porque su opinión es lo que cada uno quiere escuchar, pasan desapercibidos, nadie recuerda su cara.
Los "necesito entender": cada cosa tiene su explicación, cada sentimiento debe ser verbalizado, cada acción tiene su razón de ser y debe ser claramente explicada con intensidad, duración y motivo UFFF!
Existen para mí estos y otros tipos..... y claro, queda el tipo YO, que es tiene lo detestable de cada uno de los anteriores.