Este mes tengo las mañanas libres, bueno libres de ir al trabajo porque tengo que preparar la clase para el grupo de merd y leer mi clase de laboratorio... me gusta eso de tener tiempo en mi casa para hacer mis cosas, va a durar poco pero lo voy a disfrutar.
Hoy vino una querida persona a visitarme, le preparé un café y yo me hice un delicioso té, comí las cosas que me gustan, las tostadas del Cyrano, con el dulce exacto untadas con queso con hierbas, galletas de coco, una pizca de azúcar en el té y una agradable conversación, agradable por la compañía porque hablamos de cosas tristes, duras, conflictos, historias.
Por qué quiero a esta persona... bueno en algunas ocasiones me he enojado con ella (claro yo soy bien resentida), otras veces no hemos estado cercanas, pero muchísimas veces ella ha estado para mi y yo para ella, hemos compartido muchas más cosas que la sangre, hemos madurado, crecido y aprendido nos hemos caido y siempre después nos levantamos.... ayayyaya.
Cuando está lejos me hace falta, me hace falta su cabeza fria, su seriedad ante algunas cosas y su sencillez, su oído abierto y sus palabras dulces...
Pero cuando se acerca estamos cerca y la suerte es que así será para siempre.... y no necesitamos ni de té ni de café
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