viernes, 10 de junio de 2011

Lección aprendida duramente

Hoy cometí un error que me va a costar mucho dinero, dinero que no tengo. Creo que esta vez aprendí que debo decir NO cuando no puedo.

Estaba muy contrariada, preocupada por cómo voy a pagar.... pero por suerte no dejé que mis ansias me hagan explotar... hice dormir a mi hija... y me puse a pensar en cómo solucionarlo.....

La solución no es perfecta, claro, pero tengo que asumir la responsabilidad de esto.... y alguien (yo) tiene que pagarlo.


Por el momento me contento con una doble porción de pastel, un vaso de leche y mañana será otro día.


Lección aprendida!

miércoles, 1 de junio de 2011

Lactancia

Me duele tanto tanto cuando sé de una mujer que sufre su lactancia.... 

Mi lactancia con mi segunda hija no fue como esperaba, resultó más difícil.... pero yo sentía tener el conocimiento de lo que era lo mejor... y por qué no era como yo pensaba... sí sentí pena, culpa, rabia... y mi hija tomó leche artificial.... pero cuando me sentí más perdida, encontré a los libros de Carlos González, y él me encantó, y él me respondió mis dudas de la forma como yo necesitaba y en la forma en la que yo entiendo. Sin que me traten como idiota y con ciencia...que es cómo yo pienso. 

Al encontrarlo todo cambió para bien. Mi hija sigue con su la tetita de la mamá, de vez en cuando toma leche de vaca (estoy en busca de un vaso que me convenza)... y así como la mamá de Irene, aveces me cuestiono lo de mi lactancia larga. Yo en este momento no me veo dando de lactar a un niño de tres años, pero por el momento estamos bien. Ella es aún una pequeña indefensa que necesita la leche de su mamá para alimentarse, para tranquilizarse, para estar juntas, para dormir, y yo aún necesito que ella me necesite así.

Cuando sé de las madres que están empezando y sufriendo su lactancia, me dan ganas de enviarles todos los libros decirles miles de consejos que no se rindan, que no sufran... pero sé que no es el momento, que es cómo un duelo, que tienen miles de personas diciendo cosas y abruma... creo que sólo podría decir las cosas a personas muy cercanas...